La atención al cliente no es solo una parte del negocio: es el negocio. Una experiencia amable, rápida y cercana puede marcar la diferencia entre una venta única y un cliente fiel. Acá te compartimos 5 claves prácticas para mejorar día a día:
1. Escuchá con atención (en serio😅)
No interrumpas, no asumas. Escuchar con empatía permite entender lo que el cliente necesita y resolver mejor su consulta. A veces, solo con sentirse escuchado, el cliente ya se va más contento.
2. Respondé rápido (aunque no vayas a gestionar la consulta 😅)
Una respuesta a tiempo vale oro. Incluso si aún no tenés la solución.El silencio genera incertidumbre y puede percibirse con desinteres. Te sugerimos, al menos, una respuesta pre-armada indicando que estas trabajando en esa consulta 😎
3. Sé claro y honesto
Evitate frases complicadas o promesas que no podés cumplir. La transparencia genera confianza, incluso si la respuesta no es la que el cliente esperaba.
4. Dale un toque humano 💗👌
Saludá con nombre, usá un tono amable, agregá una sonrisa (aunque sea por mensaje). ¡EXISTE UN EXCESO DE BOOTS Y DE IA!
El toque humano, atrae clientes HUMANOS.
5. Transformá errores en oportunidades
Si algo salió mal, es el momento perfecto para demostrar el valor de tu atención. Pedí disculpas, solucioná rápido y, si podés, compensá el inconveniente. ¡Un cliente bien tratado tras un error puede volverse un cliente fidelizado!
Una buena atención no es un detalle, es la razón por la que vuelven.
